24 de abril de 2011

Yo he venido para que tengan vida,

y para que la tengan en abundancia. Juan 10, 10


La sociedad en que vivimos margina a los jóvenes pues les niega la oportunidad de acceder a estudios superiores, les niega la oportunidad de tener un trabajo digno y estable, les niega la oportunidad de un recreación digna y adecuada y los convierte en fácil presa del crimen organizado

El ejército, por su parte, sentencia y ejecuta a los jóvenes sin derecho a juicio ni a defensa y como consecuencia de esto, nuestras familias están asustadas y desamparadas



Pascua significa “Paso del Señor”

·         Paso de la nada a la vida

·         Paso de la esclavitud a la libertad, a la capacidad de tomar decisiones

·         Paso del individualismo, del vivir aisladamente a vivir con los demás

·         Paso de la muerte a la vida



Celebrar la Pascua significa

·         Vivir a fondo la vida, las enseñanzas, los valores de Jesús de Nazaret, el Crucificado, el Resucitado

·         Apreciar los valores que hay en mí y los valores que hay en los demás para que uniéndolos trabajemos para que todos tengamos vida y vida en abundancia

·         Construir la comunidad solidaria frente a todos los problemas en particular los del momento presente: la violencia y la inseguridad pública

·         Construir relaciones de respeto, diálogo y colaboración en lugar de relaciones de violencia y autoritarismo

·         Vivir la alegría y la hermandad

·         Luchar en defensa de los jóvenes víctimas de una sociedad que los margina de los estudios superiores, de un trabajo digno, de una recreación adecuada y los con vierte en presa fácil del crimen organizado

·         Tomar la decisión de alzar nuestra voz en defensa de la vida de los jóvenes

·         Participar en la denuncia de  todos los agentes de la muerte: declarar un “Ya basta” no sólo a la violencia del crimen organizado sino también a las instituciones “El Ejército y la Marina” que, abusando de su fuerza y del poder que tienen en la sociedad, son verdaderos agentes de muerte

·         Con Monseñor Romero tendremos que declarar:  En nombre de Dios, pues, y en nombre de este sufrido pueblo cuyos lamentos suben hasta el cielo cada día más tumultuosos, les suplico, les ruego, les ordeno en nombre de Dios: ¡Cese la represión ... !  CCR

1 comentario:

  1. La muerte no tiene la última palabra!!
    Hoy mas que nunca necesitamos que Jesús continúe haciendo arder en nuestro corazón la llama de la esperanza, para reconocer, vivir y experimentar a Jesús en fraternidad y solidaridad. Es necesario tambien reconocer ese rostro de Jesús que muchas veces nos negamos a ver o que no vemos porque tiene diferentes trajes pero que tambien sufre...

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